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San Juan, 3 jul (EFE).- La joven Alma Simó fundó la organización Iglesias Cristianas para Sordos en Puerto Rico después de convertirse en intérprete para poder conversar por lenguaje de señas con su sobrino, privado de la audición.

Simó explicó hoy a Efe que estableció la entidad con el objetivo de llevar la Palabra de Dios a la comunidad sorda en la isla a través de iglesias que tienen servicio de intérpretes.

“La población de sordos es tan inmensa y solo había en tres o cuatro iglesias. Pero tras investigar profundamente si habían más templos que llevaran a cabo dicha labor, encontré 32 de ellas”, resaltó Simó.

Según el Censo de Puerto Rico, en 2000, en la isla caribeña había 150.000 sordos, pero actualmente la cifra se elevó a 450.000.

La intérprete relató que su interés por identificar a esas comunidades religiosas comenzó cuando en 2001, después de conocer que su sobrino era sordo, quiso aprender el lenguaje de señas para comunicarse con él.

Simó decidió tomar un curso básico de lenguaje de señas y prosiguió a un nivel avanzado hasta convertirse en intérprete, de forma que podía llevar a su sobrino a la iglesia y enseñarle lo que el pastor predicaba.

“Es una población que vive día a día en una burbuja de silencio, olvidados por su familia, en la que la mayoría de sus integrantes no conocen el idioma del lenguaje de señas, por lo que el sordo vive en su familia como el eterno extraño”, sostuvo Simó.

Explicó además que la mejor manera para que un sordo pueda escuchar la palabra de Dios es que un intérprete esté al lado del pastor y traduzca sus palabras el código de quienes no oyen.

Aclaró que no todos los sordos son también mudos, pues los sordomudos son consideradas personas que tienen problemas con las cuerdas vocales que no pueden omitir sonidos.

Simó señaló que de todos los impedimentos, la sordera es la más discriminatoria porque los oyentes no reconocen si una persona es no-oyente a diferencia de otra que está en silla de ruedas o un ciego que se ayuda con su bastón o un perro guía.

“Inclusive, hay muchos sordos que no usan audífonos y no sabes cómo identificarlos y no te pueden responder. Y en ese momento, la gente no trata de comunicarse. Los sordos sufren mucho”, abundó Simó, quien describió su trabajo como una pasión.

Simó y su organización han lanzado además el primer directorio de iglesias para sordos en Puerto Rico con el fin de ayudar a encontrar templos cristianos para la comunidad no-oyente.

“Lamentablemente, muy pocas iglesias cuentan con intérpretes de lenguaje de señas y las pocas que hay no están identificadas. Es por eso que decidimos crear este directorio”, dijo Simó.

El directorio es gratis y está disponible en la página oficial de Facebook de la organización o se puede solicitar por correo electrónico a [email protected].

Y como parte del compromiso que tiene Simó, el próximo día 20 se celebrará un retiro para intérpretes de señas y futuros traductores del lenguaje para los no-oyentes en la Iglesia Evangélica Emmanuel en Carolina, ciudad colindante a San Juan.